La combinación de ibrutinib (Imbruvica) más venetoclax (I+V) como tratamiento de duración fija en comparación con clorambucilo más obinutuzumab (Clb+O)
mejora la supervivencia libre de progresión (SLP), así como la
duración de la remisión, en pacientes de edad avanzada o UNFIT con leucemia linfocítica crónica (LLC) no tratados previamente.
Estos son los resultados principales del estudio fase 3 GLOW que la especialista Carol Moreno,
miembro Senior del Departamento de Hematología del Hospital de la Santa
Creu i Sant Pau de Barcelona, ha comunicado durante el encuentro
virtual que ha organizado Janssen con motivo del Congreso anual de la Asociación Europea de Hematología (EHA) 2021.
“Hemos observado que la combinación I+V como terapia de primera línea
muestra una supervivencia superior en comparación con la quimioterapia,
incluyendo pacientes mayores y pacientes con muchas comorbilidades.
Asimismo, permite alcanzar una alta tasa de enfermedad mínima residual
indetectable (EMRi), particularmente en médula ósea”, subrayó Moreno.
En concreto, las respuestas a I+V de duración fija se mantuvieron después del final del tratamiento:
un 84,5 por ciento (49/58) de los pacientes mantuvo una EMRi en sangre
periférica desde el tercer mes tras la finalización del tratamiento
hasta la evaluación realizada 12 meses después de dicha finalización. El
perfil de seguridad y tolerabilidad de I+V fue consistente con el
tratamiento de la LLC en una población de edad avanzada con
comorbilidades.
“Por primera vez tenemos tenemos varias terapias dirigidas para LCC.
También por primera vez, hemos comprobado que el tratamiento de
duración fija de ibrutinib es capaz de mejorar la supervivencia de
progresión en otra población. Ahora, necesitamos averiguar si se
alcanzan mejores resultados con la terapia continúa o con la de duración
fija”, expone Moreno.
Mieloma múltiple
Por su parte, Thierry Facon, profesor en el
departamento de Hematología en la Universidad de Lille (Francia), ha
presentado en este mismo encuentro los resultados del estudio MAIA.
Según sus conclusiones, la adición de daratumumab (Darzalex) a lenalidomida y dexametasona (D‑Rd) consiguió un beneficio estadísticamente significativo en la supervivencia por encima de lenalidomida y dexametasona (Rd)
solos en pacientes con mieloma múltiple de nuevo diagnóstico (NDMM) que
no eran candidatos a trasplante autólogo de sangre periférica (TASPE) y
se habían tratado hasta la progresión.
El análisis preliminar preespecificado de la SG reveló que, después
de una mediana de seguimiento de casi cinco años (56,2 meses), se observó una reducción del 32 por ciento en el riesgo de muerte en el grupo de tratamiento con D-Rd frente al grupo de Rd.
“Estos datos proporcionan una nueva referencia de SLP en pacientes que
no son elegibles para trasplante. Los resultados de SLP y SG se han
logrado en la población de estudio con un 44% de pacientes de 75 a 90
años”, ha puntualizado el profesor.
Los nuevos fármacos de Janssen
En el encuentro virtual también se ha hecho un repaso de los nuevos resultados con tratamientos biespecíficos que ya fueron presentados en el Congreso Anual de ASCO 2021.
Este es el caso de Teclistamab, un anticuerpo
biespecífico redireccionador de células T en investigación, que mejora
la tasa de respuesta global (TRG) del 65 por ciento de los paciente en un grupo de sujetos con MM en recaída o refractario que habían recibido una mediana de cinco líneas de tratamiento previas, tras seis meses de seguimiento.
Por su parte, talquetamab ha mostrado una TRG del 70
por ciento en 30 pacientes con MM en recaída o refractario, los cuales
habían recibido una mediana de seis líneas previas de tratamiento. Cabe
recordar que talquetamab es el primer anticuerpo biespecífico
experimental (el primero en su clase) dirigido a GPRC5D, una nueva diana del MM, y CD3, el receptor de células T.
Finalmente, han recordado los nuevos datos de ciltacabtagene autoleucel (cilta-cel), una terapia celular experimental CAR-T
dirigida al antígeno de maduración de células B (BCMA), los cuales
muestran respuestas mantenidas y duraderas en pacientes muy pretratados
con MM en recaída o refractario.
Estos últimos resultados muestran una SG a 18 meses del 81 por ciento
de los pacientes. Los datos del estudio CARTITUDE-1 han respaldado la
presentación de una solicitud de autorización de comercialización ante
la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) en abril de 2021.